The truth in front of your eyes

The truth in front of your eyes

lunes, mayo 01, 2006

Little Things

Estar en un pozo profundo y no saber como salir.... es duro.
Estar enamorado y no saber como reaccionar... es difícil.
Sentir un vacío profundo en el pecho... angustia.
Llorar sin tapujos y no saber porqué... descarga.
Un día alejado de todo... repara.
Mirar al cielo en un día despejado y con sol... reconforta.
Oler profundamente el perfume de una flor... alivia.
Sonreír porque sí... emociona.
Sentirse bien con una buena acción... alimenta al alma, la llena de goce y satisfacción.

Todas éstas cosas son pequeñas... insignificantes a veces... pero modifican nuestras emociones, hacia cualquier extremo.
Somos pequeñas piezas de ajedrez en el juego de la vida... en el que el destino juega con nosotros a su antojo... en un mano a mano con la suerte.
Caprichosa es la ella que está empeñada en acompañar a unos dejando desamparados a otros... Bondadoso es él que nos acompaña a todos siempre, hasta el final.

Sea como sea... nosotros estamos obligados a seguir adelante, porque así están hechas las reglas del juego... porque aunque nos parezca mentira... tarde o temprano todos salimos adelante... algunos antes... otros después... a veces tan después que no les alcanza la vida, y lo hacen después de la muerte.

Sea como sea... todos salimos de los malos tramos, o por lo menos lo intentamos... aunque a veces nos lamentamos por demás.

Deberíamos disfrutar más todas esas pequeñas cosas... prestarles más atención... porque son pequeñas, pero importantes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ya es hora....el reloj no ha detenido su marcha implacable, no hay complices para alguien
que no quiera dar vuelta la pagina, pocas veces he sentido tanta cobardia en mi corazón.
Si es como estar esperando al
borde de una ruta desierta por alguien que me lleve pero al mismo tiempo tener miedo de que nadie venga o miedo a no saber a donde me llevarán....a fin de cuentas...no se donde quiero ir ; tambien sé que no podre quedarme
aca infinitamente. Valentía? yo creia tener mucha, solo que ahora...no creo que sirva para algo, no tengo amor
no tengo odio, no siento nada, estoy en un coma lúcido, suspendido en la realidad. No niego que es cómodo.
Quizas sea mejor sentarme con la cabeza entre las rodillas, cerrar los ojos y confiar.